¿ Y si vivimos desde el Corazón ?

No traiciones lo que te hace vivir. No traiciones lo que llevas en el corazón. No traiciones lo que llevas dentro de ti… aquello que ves cuando cierras los ojos… aquello que te hace vibrar cuando piensas en ello.

Todos tenemos una cita con la vida cada día, y a veces sin darnos cuenta, pasamos de largo, no nos acordamos, llegamos tarde al encuentro o simplemente no llegamos. Subimos al vaivén de todos los días como autómatas programados, con un patrón fijo y definido, y por el camino vamos perdiendo lo más auténtico de nosotros…  vamos perdiendo aquello que vive en nuestro corazón.

Hace tiempo que me di cuenta que no podemos perder la perspectiva del corazón. Hace tiempo que aprendí a escucharlo. Hace tiempo que aprendí a estar en silencio para sentir cada uno de sus latidos. En esos latidos, os confieso, he encontrado muchas veces el camino cuando más perdido estaba.

Como dice en su libro Alfonso Puig “Vivir es un asunto urgente” y no puedo estar más de acuerdo. Nos urge vivir. Nos urge empaparnos de vida. Nos urge desgarrar la vida y sus momentos. Nos urge respirar sumergidos en aquello que nos hace vibrar, que nos llena de felicidad, que nos hace sonreír, que nos llena de vida, de energía… nos urge vivir y aprovechar el tiempo regalado en todo aquello que merezca la pena. Nos urge vivir y separarnos lo antes posible ,y sin gastar ni un gramo de energía, de todo aquello que nos asfixia, que nos contamina, que no nos aporta valor… y nos urge hacerlo porque el tiempo inevitablemente se nos escapa.

Es urgente saborear las sensaciones que nos produce la alegría y recrearnos en ellas para expandirlas en nuestra vida. Debemos apresurarnos y enchufarnos a nuestros pensamientos positivos ,cada día ,para vivir plenamente desde el Corazón, tratando de ser siempre quienes somos, sin renunciar a aquello que soñamos.

“ Los hombres cultivan mil rosas en un mismo jardín… y no encuentran lo que buscan… y sin embargo, lo que buscan podría encontrarse en una sola rosa… pero los ojos están ciegos. Es necesario buscar en el CORAZÓN”.

Antoine de Saint-Exupéry (El principito)